El Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) combinó su extraordinaria sensibilidad y área de recepción de señales con las del telescopio Atacama Pathfinder Experiment (APEX) para crear un nuevo instrumento gracias a un proceso conocido como interferometría de línea de base muy larga (VLBI, en su sigla en inglés). En el VLBI, datos de dos telescopios independientes se combinan para formar un telescopio virtual que aprovecha la distancia geográfica entre ellos, alcanzando un poder de aumento extraordinario.
La observación de ALMA y APEX realizada el 13 de enero en este contexto fue una prueba crucial para el Event Horizon Telescope (EHT), que consistirá en una red mundial de telescopios que operan en longitudes de onda milimétricas. Una vez terminado, el EHT —del cual ALMA será la instalación más grande y sensible— formará un telescopio a escala mundial con la capacidad de aumento necesaria para observar detalles en los límites del agujero negro supermasivo situado en el centro de la Vía Láctea.
Para esta observación sin precedentes, ALMA y el telescopio vecino APEX observaron al unísono un quásar conocido como 0522-364, una galaxia distante que suele usarse para hacer pruebas radioastronómicas debido a su extraordinario brillo. Para garantizar una sincronización perfecta de los telescopios, ALMA usó su nuevo reloj atómico, que destaca por su inigualable precisión, para asignar marcas de tiempo a los datos a medida que los recolectaba. Esta técnica es esencial para el proceso de VLBI porque permite sincronizar e integrar minuciosamente los datos recabados por diferentes telescopios en lugares distintos.
ALMA, el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array, ha conseguido combinar exitosamente su enorme área de recolección y sensibilidad con la de APEX (Atacama Pathfinder Experiment), para crear instrumento nuevo y único, mediante un proceso denominado Very Long Baseline Interferometry (VLBI). Esta primera observación exitosa de ALMA con el VLBI usó una línea de base de 2,1Km y fue un examen esencial de prueba de concepto para el planificado Event Horizon Telescope que, eventualmente, incluirá una red global de telescopios operando en longitudes de onda milimétricas. Crédito: Clem & Adri Bacri-Normier (wingsforscience.com)/ESO.
En el marco de la primera prueba realizada con el sistema, se envió por internet un fragmento de cinco segundos de datos al correlacionador del VLBI del Observatorio Haystack, perteneciente al Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), para que combinara ambas señales en una sola. Esta operación confirmó que el sistema funciona correctamente y que el reloj atómico de ALMA (ver anuncio) es lo suficientemente estable para el proceso de VLBI. Se trata, pues, de un importante hito que confirma la capacidad de ALMA para formar parte del EHT.
El paquete de datos completo de la observación se grabó en discos duros y se envió al MIT para someterlo a un análisis exhaustivo. Debido a la gran cantidad de datos que se recabaron, es más rápido mandarlos por avión que por internet a través de la conexión internacional más rápida disponible.
“El equipo entero está muy satisfecho con estos exitosos resultados del VLBI logrado con ALMA. Es un paso gigante hacia la obtención de las primeras imágenes de un agujero negro con el Event Horizon Telescope”, celebra Shep Doeleman, investigador principal del Proyecto de Sincronización de ALMA y director asistente del Observatorio Haystack.
Este trabajo fue efectuado por un equipo formado por miembros del Proyecto de Sincronización de ALMA, el Joint ALMA Observatory, el Smithsonian Astrophysical Observatory y el telescopio APEX.
Información adicional
El Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), una instalación astronómica internacional, es una asociación entre el Observatorio Europeo Austral (ESO), la Fundación Nacional de Ciencia de EE. UU. (NSF) y los Institutos Nacionales de Ciencias Naturales de Japón (NINS) en cooperación con la República de Chile. ALMA es financiado por ESO en representación de sus estados miembros, por NSF en cooperación con el Consejo Nacional de Investigaciones de Canadá (NRC) y el Consejo Nacional de Ciencia de Taiwán (NSC), y por NINS en cooperación con la Academia Sinica (AS) de Taiwán y el Instituto de Ciencias Astronómicas y Espaciales de Corea del Sur (KASI).
La construcción y las operaciones de ALMA son conducidas por ESO en nombre de sus estados miembros; por el Observatorio Radioastronómico Nacional (NRAO), gestionado por Associated Universities, Inc. (AUI) en representación de Norteamérica; y por el Observatorio Astronómico Nacional de Japón (NAOJ) en nombre de Asia del Este. El Joint ALMA Observatory (JAO) tiene a su cargo la dirección general y la gestión de la construcción, así como la puesta en marcha y las operaciones de ALMA.
Fuente: ALMA