En 2005 fue fundada en Chile la ONG Derechos Digitales, como el proyecto de un grupo de jóvenes abogados, visionarios de la discusión que vendría, respecto al ejercicio de los derechos en Internet. Actualmente, cuentan con 13 profesionales, distribuidos entre sus oficinas de Santiago y Ciudad de México, y tienen como principal misión la defensa y la promoción de los derechos humanos en el entorno en línea. Su trabajo se concentra en tres grandes ejes: libertad de expresión en Internet; derecho de acceso al conocimiento y la cultura; y derechos vinculados con la privacidad y vigilancia.
En la práctica, esto se traduce en la publicación de estudios, informes y artículos de interés, relacionados con la contingencia en Latinoamérica. Además, cuentan con un equipo de incidencia pública, que se dedica a pensar en cómo esos productos tienen efecto en el público, llevándolos a campañas de Internet, producción de stickers y muchas otras cosas, que apuntan a generar un cambio legislativo y de políticas públicas, una influencia en quienes toman las decisiones y una sensibilización en la gente también.
Como explica Claudio Ruiz, director ejecutivo de Derechos Digitales: “Nosotros vemos Internet como un espacio de desarrollo de derechos muy importante -por ejemplo la libertad de expresión se ha visto particularmente fortalecida con la masificación de las nuevas tecnologías-, pero al mismo tiempo hay un montón de amenazas, respecto de ese mismo derecho y de otros, como privacidad, o acceso al conocimiento y la cultura en línea. Entonces, en esa dicotomía, de derechos que se pueden ver fortalecidos pero al mismo tiempo se pueden ver amenazados en Internet, es que surge Derechos Digitales, para hacer frente a esto, desde el interés público”.
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